Consejos sobre alimentación y cuidados de Jerbos
Roedor de la familia Dipodinae. Jaculus spp
- Los jerbos son pequeños roedores cuya característica más llamativa son sus largas patas traseras. Pueden medir unos 10-12 centímetros, sin contar la cola, que puede alcanzar otros 10 centímetros. Tienen una complexión delgada, ojos saltones y un cuello pequeño que apenas se distingue de su cabeza, que es ancha y corta. Sus orejas son pequeñas y ovaladas.
- Su esperanza de vida suele ser de dos a cuatro años.
- Su peso está entre 40 y 60 gramos y algunas variedades pueden superar los 110 gramos.
- Llaman la atención por su carácter dócil y amigable. Son juguetones, pacíficos, curiosos e inquietos. Normalmente no muerden a menos que se sientan realmente amenazados. El jerbo es muy bueno interactuando con los humanos, por lo que se considera una buena mascota. A los niños hay que enseñarles que son sensibles y delicados y que los movimientos bruscos pueden lastimarlos. Es recomendable iniciar la socialización desde que llegan a casa, para que se acostumbren a ser manipulados y aceptados.
- Su curiosidad le lleva a examinar su entorno, es común verlo “de pie” estirado sobre sus patas traseras, atento a cualquier cambio que pueda producirse a su alrededor.
- El jerbo es todo un atleta: es rápido, buen saltador, capaz de elevarse más de medio metro del suelo y también trepa.
- El jerbo es una mascota muy limpia que se acicala a sí mismo y al resto de los miembros del grupo. No tiene un olor fuerte.
- La temperatura ideal de su habitación debe ser de 18ºC-28ºC y nunca deben dejarse expuestos al aire libre ni a corrientes de aire. Es bueno que tomen un poco de sol cada día para absorber vitaminas y metabolizar el calcio, pero nunca cuando hace mucho calor.

ALIMENTACIÓN:
- Los jerbos son omnívoro, comen de todo. El pienso exclusivo para jerbos es lo más indicado para alimentarlo. Las mezclas de semillas para otros pequeños roedores como los hamsters deben complementarse con semillas de aves (alpiste, cebada, avena, centeno, maíz, trigo ) y retirar algunas pipas de girasol que suelen ser muy grasas. Aparte del pienso, puedes darle otros alimentos de vez en cuando, una vez por semana algún fruto seco, siempre crudos y sin sal.
- Se puede complementar de manera esporádica con un trocito de huevo cocidos, frutas y verduras. Las más aconsejables son la zanahoria y la manzana, pero solo dos veces a la semana. Evita las uvas pasas, los cítricos, las fresas y otras frutas rojas.
- Los insectos y pequeños gusanos forman parte de su dieta natural.
- Un buen hábito es acostumbrarlo a cumplir horarios de comida, preferiblemente en las mañanas.
- Un detalle a tener en cuenta es que los jerbos tienen la costumbre de tapar o esconder el su comedero, es algo innato y lo harán por mucho que intentemos quitarles esa costumbre. Cuando ya no tengan comida, sacarán de nuevo el comedero de debajo del sustrato y nos lo dejarán visible para que veamos que necesitan comida.
- No se debe poner mas comida si aun tienen, porque de esa manera elegirán siempre lo que mas les guste comer y dejarán el resto. Se repone comida cuando ya no hay o se retira los restos de la comida anterior.
CURIOSIDADES:
- El comportamiento de arrastrar su abdomen por el suelo tiene como finalidad marcar el territorio con una glándula odorífera que está alojada justo en esa zona de su cuerpo. También lo hace con otros miembros del grupo o con tu mano si le gustas y no te teme.
- El mejor juguete que puedes darle a un jerbo es un rollo de cartón de papel higiénico o de papel de cocina. Tendrá asegurada la diversión hasta que lo haga trizas con sus potentes incisivos.
- El jerbo se lo pasa bomba excavando o, al menos, intentándolo y es que en la naturaleza este animal construye túneles que le sirven de madriguera.
- Si un jerbo está solo se pondrá triste. Lo ideal es buscarle un compañero de su mismo sexo para que vivan felices y no se reproduzcan.
- No se debe sujetar un jerbo por la cola, una de las técnicas que tiene esta especie para escapar de sus depredadores es desprenderse de la cola y si eso ocurre, no peligra su vida pero la cola no le vuelve a crecer.
- Las camadas de los jerbos suelen ser de entre 2 y 10 individuos aunque raramente pasan de los 7. Cuando se produce una camada de pocos individuos, las probabilidades de que mueran son altas ya que no estimulan lo suficiente a la madre para que produzca leche.
- Generalmente los jerbos macho tienen un carácter más dócil que los de sexo femenino.
